La importancia de la programación y el análisis de las redes sociales
En el mundo de las redes sociales, es importante ser proactivo en lugar de reactivo. Eso significa que, antes de empezar a crear contenido para tus distintas plataformas de medios sociales, tienes que dedicar algo de tiempo a programar su publicación y obtener analíticas para analizar los resultados. Además, tienes que ser consciente de dónde pueden aparecer posibles crisis y tener un plan para afrontarlas con eficacia
Programar tu contenido
Una de las peores cosas que puedes hacer en las redes sociales es publicar esporádicamente. Tus seguidores y fans quieren ver un contenido regular y consistente de tu parte. Por eso es importante que te tomes un tiempo para programar tu contenido.
Creando por lotes o reutilizando contenido antiguo, puedes asegurarte de que tus plataformas de redes sociales estén siempre actualizadas con material fresco y relevante. Esto no sólo mantendrá a tus seguidores comprometidos, sino que también te ayudará a ahorrar tiempo a largo plazo.
Analizar los resultados
Una vez que tengas un flujo constante de contenido publicado en tu nombre, es importante dar un paso atrás y analizar los resultados. ¿Qué tipos de publicaciones están obteniendo más participación? ¿Quién se compromete con tu contenido? ¿Cuándo es el mejor momento para publicar?
Todas estas son preguntas importantes que pueden responderse echando un vistazo a tus análisis. Una vez que comprendas mejor lo que funciona y lo que no, podrás ajustar tu estrategia en consecuencia.
Prepararse para las crisis
No importa lo bien que lo planifiques, siempre existirá la posibilidad de que surjan crisis en las redes sociales. Tanto si se trata de una crítica negativa como de un desastre de relaciones públicas, es importante tener un plan para afrontar estas situaciones con eficacia.
El primer paso es elaborar un diagrama de flujo de respuestas a los distintos tipos de comentarios (positivos, preguntas, quejas, crisis) con los responsables en función de la situación. Además, debes elaborar un documento en el que se especifiquen las preguntas o situaciones con sus respuestas.
De este modo, cuando se produzca cualquier situación, no tendrás que improvisar: ya tendrás una respuesta autorizada y lista. Por último, celebra una reunión cada 3 meses con todos los miembros del equipo para actualizar el documento.