Atención médica virtual: una tendencia que ha llegado para quedarse
Te contamos cómo puedes implementar las videoconsultas con tus pacientes
La crisis del COVID-19 ha hecho que tengamos que replantearnos muchas de nuestras actividades cotidianas.
Una es nuestra modalidad de trabajo. Muchas empresas ya han optado por el teletrabajo total o parcial. Y otra es la consulta con el médico.
La realidad es que no siempre es necesario que el paciente se traslade a la consulta. Por ejemplo, a veces el paciente solo debe llevarle al médico resultados de un estudio, y no es necesaria ninguna revisión física. Esto ha hecho que muchos pacientes elijan las videollamadas para tener una cita con su médico, y así evitar el contacto directo y el traslado en estos tiempos de pandemia.
La atención por videollamada es una excelente solución. Tanto el paciente como el médico no están expuestos a posibles contagios en la clínica, y también queda fuera el riesgo del traslado, ya que muchas personas deben moverse en transportes públicos.
Esta modalidad de atención virtual se está aplicando también en consultas de psicología o incluso de veterinaria.
Muchas clínicas, centros médicos o centros veterinarios ya implementan la opción de la videoconsulta.
¿Cómo puedes aplicar la videoconsulta con tus pacientes?
En primer lugar, es importante que tengas un sitio web donde el paciente pueda solicitar cita previa. La cita online también es uno de los servicios más demandados, dejando atrás a las llamadas telefónicas.
En tu página web, deberás darle al paciente la opción de elegir si prefiere cita presencial o cita online.
Una vez que tu paciente reserva su cita virtual, debes tener un canal virtual disponible con audio y vídeo para poder realizar la consulta.
Se pueden utilizar algunas plataformas populares y gratuitas, como Zoom o Skype. Aunque la mejor opción es tener una plataforma incorporada en tu sitio web. Cuando llega la hora de hablar con tu paciente, este recibirá un código de acceso, y podrá acceder a un sistema de videollamado directo desde tu página web.
De esta manera, no obligas a tu paciente a instalarse ninguna plataforma de videollamada. Solo necesita tener conexión a Internet y acceder a tu página web.
Si eres médico, veterinario, psicólogo, terapeuta, profesor o formador, puedes empezar a implementar consultas por videollamada. Ahorrarás tiempo, dinero y protegerás a tus pacientes o alumnos.